VUELA PLUMA EDICIONES te invita a descubrir esta exposición en el estudio de la calle San Lucas 3, Madrid 28004.
Los días martes 22 al viernes 25 de Enero 2013 de 12h a 14h y de 16h30m a 20h30m
Los días martes 22 al viernes 25 de Enero 2013 de 12h a 14h y de 16h30m a 20h30m
EXPOSICIÓN DISEÑO GRÁFICO SOVIÉTICO 1924-1933
Las diez obras seleccionadas representan cinco de las tendencias principales dentro del comúnmente denominado "Constructivismo Ruso": Art Decó, Purismo, Constructivismo, Fotomontaje y Collage.
Desde los primeros años veinte hasta comienzos de los treinta cuando la "perestroika" o reestructuración de las organizaciones artístico-literarias (1932), modifica toda una época artística, siete autores destacados del periodo: Chásnik, Lissitzky, Gan, Ilín, Levin, los hermanos Stenberg, Taguírov ; y tres diseñadores que hasta la fecha no han sido identificados, definen una decena de los variados rostros que manifestó la revolución gráfica sovietista.
Las obras y autores seleccionados forman parte de los museos y colecciones privadas de arte más importantes del mundo.
Esta exposición que presentamos en el espacio de Vuela Pluma
constituye una base que nos puede permitir teorizar sobre el efecto
que nos producen textos y contemplación gráfica.
constituye una base que nos puede permitir teorizar sobre el efecto
que nos producen textos y contemplación gráfica.
Considero este tipo de comunicación como una intervención que se
manifiesta en el mundo, en las estructuras sociales y en la
literatura.
Carlos Flores escribe a continuación sobre el hecho y la importancia del diseñomanifiesta en el mundo, en las estructuras sociales y en la
literatura.
gráfico en la primera parte del siglo XX:
El diseño gráfico en las primeras décadas de la antigua URSS, constituye un
fenómeno artístico inigualable. La suma de las diferentes tendencias dentro
del comunmente denominado Constructivismo y de los diversos orígenes
profesionales de los autores que lo desarrollan, pintores, arquitectos,
amateur,etc, hace que su resultado formal sea el más variado y rico de toda
Europa en aquel mismo periodo. Ni alemanes, holandeses, suizos, checos o
polacos llegarán al grado de libertad ni a los medios editoriales que
alcanzaron en Rusia.
Por estas razones no es de extrañar que siga aun siendo un periodo por
descubrir.
Si a esto añadimos la "costumbre" de los grandes Museos en los que su
principal fin no es hacer comprensible un perido concreto, si no revalorizar
sus fondos situando el nivel del Arte en los propios almacenes,y no en el
profundo conocimiento de una época, se puede dar la paradoja de que en la
expo del MoMA dedicada al tema en cuestión, pasaran inadvertidos autores
esenciales como Nikolai Ilín, o persistieran errores de bulto como el que
adjudica la cubierta del Constructivism (1922) de Alexei Gan al propio
autor, y no a Aleksandr Ródchenko como se sabe ya desde hace algunos años.
Quizás la dificultad del continente-idioma (Rusia no es un país, es un
continente) ha dificultado el acercamiento a dicho inconmesurable ámbito, y
su devenir histórico ha forzado que una lectura superficial se mantenga como
incómodo cliché.
La exposición que tiene lugar en el espacio de Ediciones Vuela Pluma,
pretende de manera casi telegráfica abordar estos aspectos y colaborar en el
entendimiento del periodo y de sus autores.
Ilá Chásnik, discípulo de Tatlin, nos muestra unos de los 10 mejores diseños
del periodo en opinión de Vladimir Krichevski, máximo especialista de
aquellas décadas; una muestra del trabajo de Ilín, hace justicia al autor de
mas de 2.000 obras al que el MoMA hurtó el lugar que merece, por no formar
parte de sus colecciones; Lissitzky en una obra menos conocida que resuelve
la cubierta tipo para las obras completas de Lev Tolstoi; Gan en su diseño
de la revista SA, un clásico porqué no; Levin en representación de una masa
enorme de diseñadores que tanto especialistas como aficionados están por
descubrir y disfrutar; Taguírov, el gran constructivista tártaro que dio
imagen al VJUTEIN, especie de Bauhaus a la soviética; autores desconocidos
que desarrollan temas graficos recurrentes del momento, collage,
fotomontaje, etc.
Confiamos en que poco a poco la sólida sombra del cliché que oscurece este
periodo de gran Arte y devastador sistema político se vaya desvaneciendo,
sacando a la luz la realidad profunda de un tiempo paradójico e irrepetible.
Una pequeña expo sobre un gran país.
El diseño gráfico en las primeras décadas de la antigua URSS, constituye un
fenómeno artístico inigualable. La suma de las diferentes tendencias dentro
del comunmente denominado Constructivismo y de los diversos orígenes
profesionales de los autores que lo desarrollan, pintores, arquitectos,
amateur,etc, hace que su resultado formal sea el más variado y rico de toda
Europa en aquel mismo periodo. Ni alemanes, holandeses, suizos, checos o
polacos llegarán al grado de libertad ni a los medios editoriales que
alcanzaron en Rusia.
Por estas razones no es de extrañar que siga aun siendo un periodo por
descubrir.
Si a esto añadimos la "costumbre" de los grandes Museos en los que su
principal fin no es hacer comprensible un perido concreto, si no revalorizar
sus fondos situando el nivel del Arte en los propios almacenes,y no en el
profundo conocimiento de una época, se puede dar la paradoja de que en la
expo del MoMA dedicada al tema en cuestión, pasaran inadvertidos autores
esenciales como Nikolai Ilín, o persistieran errores de bulto como el que
adjudica la cubierta del Constructivism (1922) de Alexei Gan al propio
autor, y no a Aleksandr Ródchenko como se sabe ya desde hace algunos años.
Quizás la dificultad del continente-idioma (Rusia no es un país, es un
continente) ha dificultado el acercamiento a dicho inconmesurable ámbito, y
su devenir histórico ha forzado que una lectura superficial se mantenga como
incómodo cliché.
La exposición que tiene lugar en el espacio de Ediciones Vuela Pluma,
pretende de manera casi telegráfica abordar estos aspectos y colaborar en el
entendimiento del periodo y de sus autores.
Ilá Chásnik, discípulo de Tatlin, nos muestra unos de los 10 mejores diseños
del periodo en opinión de Vladimir Krichevski, máximo especialista de
aquellas décadas; una muestra del trabajo de Ilín, hace justicia al autor de
mas de 2.000 obras al que el MoMA hurtó el lugar que merece, por no formar
parte de sus colecciones; Lissitzky en una obra menos conocida que resuelve
la cubierta tipo para las obras completas de Lev Tolstoi; Gan en su diseño
de la revista SA, un clásico porqué no; Levin en representación de una masa
enorme de diseñadores que tanto especialistas como aficionados están por
descubrir y disfrutar; Taguírov, el gran constructivista tártaro que dio
imagen al VJUTEIN, especie de Bauhaus a la soviética; autores desconocidos
que desarrollan temas graficos recurrentes del momento, collage,
fotomontaje, etc.
Confiamos en que poco a poco la sólida sombra del cliché que oscurece este
periodo de gran Arte y devastador sistema político se vaya desvaneciendo,
sacando a la luz la realidad profunda de un tiempo paradójico e irrepetible.
Una pequeña expo sobre un gran país.
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